Imagina que estás jugando un partido de baloncesto pero no hay marcador. No puedes saber ni cuánto tiempo queda para acabar ni cómo va partido. ¿Ganamos o perdemos? ¿Deberíamos ser más agresivos si queremos defender el resultado? ¿Sería necesario pedir un tiempo muerto o dosificar a un jugador que lleva mucho tiempo jugando? Lo creas o no, en la mayoría de equipos de desarrollo software ocurre habitualmente.
Esta metáfora me la enseñó Koldo Sarachaga, creador de la empresa K2K y famoso por la transformación de la empresa de autobuses Irizar a un modelo autogestionado. Coincido en que muchos equipos tienen esta misma sensación. Equipos que están realizando un trabajo, para construir un proyecto o producto, sin entender ni comprender el rendimiento económico que están produciendo en su empresa.
Lo más curioso es que, en equipos Agile y sobre todo Scrum, también ocurre. ¿Scrum no se centraba en la entrega de valor? ¿Cómo podemos entregar valor sin conocerlo?
La transformación Agile es traducida en dinero
Llevamos muchos años hablando de Agile en las organizaciones. Algunas están empezando a sentir que han perdido el tiempo y otras han evolucionado a modelos similares a los que tenían antes de dicha transformación, pero con una capa de marketing. Hay una sensación generalizada, en el sector, de desgaste con respecto a Agile.
Por otro lado, sigue habiendo una gran necesidad de cambio en las organizaciones para mejorar nuestra eficiencia, nuestra productividad y nuestra capacidad de generar valor. Sigue existiendo una sensación general de que se pueden hacer las cosas mejor.
Es bastante sorprendente que, cuando hablamos de valor en Agile, cueste relacionarlo con el dinero. Y no nos engañemos, para las organizaciones con ánimo de lucro, el dinero es lo que mide tus resultados.
Una transformación Agile o de cualquier otro tipo que abordemos en la organización debe tener un impacto en la cuenta de resultados. Si solo lo orientamos como una mejora de procesos sin mirar a los resultados reales, acabaremos por abandonar tarde o temprano.
Equipos orientados a resultados
En los últimos años, se han abierto diferentes debates sobre el modelo de trabajo que necesitan las empresas. Es archiconocido el debate sobre el teletrabajo y ahora se está abriendo la jornada semanal de cuatro días. Todos estos debates son positivos siempre que se orienten al valor que vamos a producir en la organización.
El reto consiste en realizar la transición de métricas de “hacer” a métricas de resultados. Que un equipo aumente sus puntos de historia entregados no garantiza que generen suficiente dinero como para justificar trabajar un día menos.
Sin que un equipo pueda medir su capacidad de generar dinero en una organización, es muy difícil que tome decisiones realmente profundas para lograrlo. Tampoco podemos imponer el cambio porque el equipo lo acabará rechazando o tardarán tiempo en asumirlo.
¿Cómo conseguir equipos de resultados?
En NeuronForest, construímos Value Delivery Teams en nuestros clientes. Estos equipos funcionan orientados a resultados económicos. Si queremos demostrar que una estructura basada en equipos es mejor que una departamental, necesitamos medirlo en términos monetarios.
Un Value Delivery Team mira continuamente su aportación a la cuenta de resultados. Si queremos que el equipo se centre en mejorarla, debemos repartir parte de los beneficios de la organización con este equipo. La idea es sencilla: si la empresa gana, ganamos todos.
Esta idea puede parecer revolucionaria pero, si lo piensas fríamente, ataca directamente al corazón de las personas. Nadie quiere trabajar para que otra personas “se forre”. Todo el mundo sabe tomar decisiones económicas importantes en su vida. Decisiones como casarse, comprar una casa o hacer una inversión. Las personas están preparadas para ello siempre y cuando les dejemos espacio para hacerlo. Un Value Delivery Team con capacidad de entrega de resultados demuestra claramente que es capaz de aumentar el valor de la compañía.
Las cuentas salen
Sun Microsystem inventó el lenguaje de programación Java. Tuve la oportunidad de almorzar hace muchos años con uno de los miembros de esa empresa y nos contaba lo siguiente: «Java fue liberado como lenguaje gratuito porque preferíamos tener el 20% de un gran pastel que el 100% de un pastel pequeño»
Un Value Delivery Team orientado a resultados y valor que recibe parte de los beneficios acabará produciendo mucho más dinero para la organización, aunque haya que darle parte de ese beneficio. ¿Qué prefieres el 70% de una gran cantidad o el 100% de una cantidad pequeña que sólo funciona a base de muchos managers costosos que tienen que empujar continuamente a los equipos para sacar el trabajo?
Porque en la mayoría de empresas suele haber un manager, por cada cinco empleados, que no produce valor y tiene que empujar a los demás para hacer su trabajo. Si un equipo autogestionado no necesita esa figura y se organiza para generar más dinero, ¿no sería más beneficioso para la organización?
Por tanto, orientar nuestra empresa a resultados con Value Delivery Teams, que puedan saber su aporte de valor, es clave para encontrar nuevas organizaciones mucho más adaptativas y capaces de generar más valor en el mercado.
Y tú, ¿tienes equipos orientados a resultados?